Desde la temporada pasada hay una epidemia de decir que el equipo en el que esté Dwight Howard es el equipo que será campeón. Este año le tocó a los Houston Rockets ser los elegidos para levantar el trofeo Larry O’Brien. Obviamente, este tipo de predicciones ocurren al principio de la temporada y no es hasta ahora que podemos ver si tenían algo de oportunidad para volverse reales.

Uno pensaría que sí, que tener en el ataque a Howard, Harden, Parsons, Lin, Beverly, Garcia, etc., le da mucha fuerza a Houston mientras que su defensa también se encargaría de detener a los mejores oponentes teniendo a Dwight bajo el aro. Sin embargo, pocos pensaron que aunque Harden es una bestia ofensiva que con dos botes ya te ganó, que sólo necesita medio paso para crear espacio y sacar el tiro y que en sus venas corre la sangre fría necesaria para meter los tiros decisivos cuenta con la peor defensa que he visto en años.

Observen el video de abajo, cortesía de mi amigo Cebo.

Como pueden notar, la sofocante defensa de James Harden cuenta con una triple amenaza que consta de:

  1. Te manoteo por detrás a ver si de caca te zafo la bola.
  2. Dependo por completo de la ayuda de mis compañeros y pues, no hay porqué perseguirte si ahí están ellos.
  3. Me quedo parado porque soy James Harden o porque noté que había un pedazo de pollo de ayer atorado en mi barba. Uuu, pollo.

Llámenme anticuado, pero me cuesta creer que un equipo es capaz de ganar un campeonato cuando su mejor jugador defiende como adolescente que prefiere estar checando su Instagram a ver que selfie subieron sus amigas. Sí, se puede discutir que Kobe tampoco defiende bien y tiene 5 títulos, pero después de ver este video tienen que aceptar que Harden hace que Kobe parezca Bill Russell.

Mi momento favorito es el descaro que muestra en el minuto 1:19 al aceptar la culpa y levantar la mano cuando su hombre se lo comió por completo. Classy.

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