El Mundial de Basquetbol Femenil ha terminado y la verdad es que no hubo el mínimo espacio para una sorpresa. Las chicas de Estados Unidos demostraron que están en otro nivel, dejaron claro que son una potencia y jugando a medio gas lograron derrotar a España con marcador de 77-64 para conquistar su segunda medalla de oro consecutiva en campeonatos mundiales, no pierden una final ya sea de Mundial o Juegos Olímpicos desde 1996 y como van las cosas la cuenta se extenderá por lo menos hasta el 2016.
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Comandadas por Maya Moore, las norteamericanas tomaron muy pronto el control del juego poniendo de inmediato una ventaja de doble dígito, cifra que les permitió manejar el resto de partido a pesar de los intentos de las españolas que por primera ocasión en su historia disputaban la final de un Campeonato Mundial. Al medio tiempo la ventaja era de 48-29, además de Moore, Lindsay Whalen se lucia mostrando también su potencial ofensivo. Poco cambiaron las cosas para la segunda mitad, la distancia llegó a ser hasta de 25 puntos, pero al final se combinó el ímpetu de las españolas por realizar un papel decoroso y el hecho de que las norteamericanas sabían que nada podría robarles el triunfo.
El gran cierre de las chicas de España solo ayudó a apretar el marcador, pero habrá que destacar la labor defensiva de Estados Unidos, clave para frenar el trabajo de Alba Torrens, quien se vio limitada a tan solo 10 puntos cuando en la semifinal había anotado 28 ante Turquía.
Así se selló la victoria para el equipo de Geno Auriemma, la Selección Femenil de Estados Unidos sumo un éxito más a su brillante historial, no pierden una final dentro del Mundial desde 1983, cuando fueron derrotadas por la extinta Unión Soviética y a excepción de la semifinal que perdieron con Rusia en 2006, nadie las ha podido quitar del trono ni en Mundiales, ni en Olímpicos. En este trayecto habrá que colocar en un lugar especial a Sue Bird, jugadora que suma su cuarta medalla en Campeonatos Mundiales, la movedora del Seattle Storm en la WNBA acumula tres medallas de oro y una de bronce, nadie con más éxitos que la capitana de la escuadra norteamericana.
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Para España, la plata les sabe a oro, poco a poco han evolucionado en su juego y por fin después de varios intentos, hoy pueden presumir el hecho de encontrarse en la elite del basquetbol femenil, logrando una histórica medalla de plata que seguramente será la punta de lanza para un futuro brillante en su basquetbol.
Australia se queda con el tercero
El tercer lugar fue para Australia, de la mano de Penny Taylor, las australianas derrotaron a Turquía con marcador de 74-44. En duelo por el quinto puesto, Canadá se impuso a China, mientras que Francia venció a Serbia para completar así el grupo de las ocho mejores selecciones del torneo.
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