Por fin llegó la fecha del tan esperado regreso de Kristaps Porzings al Madison Square Garden de Nueva York, un recinto donde se convirtió en figura de los Knicks para después vestir la camiseta de los Mavericks. Como era de esperarse, el recibimiento hacía el jugador letón no fue la mejor y al momento de ser presentado la afición de los Knicks le hizo saber que no era bienvenido.

 

El “Palacio de las Tres Mentiras” se unió al unísono para abuchear a Porzingis en todo momento; lo mismo cuando buscaba el rebote que cuando iba a la línea de tiros libres. En los primeros instantes del partido, la afición comenzó a gritar “KP apesta” y dichos gritos lograron desconcertar a Porzingis, quien falló su primer disparo de la noche.

Los Knicks volvieron a dominar a los Mavericks en este nuevo encuentro, pero en la recta final del último cuarto se metieron en problemas cuando los tejanos emparejaron el marcador. La ventaja de 10 puntos que habían sacado los neoyorquinos poco a poco se diluyó y el partido se decidió en la última jugada con un disparo letal de Marcus Morris.

 

Aunque Luka Doncic le metió drama al juego, los Knicks se llevaron el triunfo 106 a 103, cosechando así su segunda victoria frente a los Mavericks en una semana. Marcus Morris se ha convertido en una pieza clave en el accionar del equipo y en esta ocasión fue el líder anotador con 20 unidades, 5 rebotes, 1 robo de balón y 1 tiro bloqueado, en tanto Julius Randle colaboró con 17 puntos, 10 rebotes y 3 asistencias.

En esta nueva derrota contra su ex equipo, Porzingis colaboró con 20 unidades, 11 rebotes y 1 asistencia, mientras que Luka Doncic sigue encendido, en esta ocasión con un triple doble de 33 puntos, 10 rebotes, 11 asistencias y 3 robos de balón.

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