El plato fuerte de la noche de viernes se sirvió en San Antonio, Texas, cuando los Celtics de Kyrie Irving se enfrentaron a los Spurs que ya esperan con ansias el regreso de Kawhi Leonard. Antes del partido, Gregg Popovich expresó su admiración hacia Kyrie y aprovechó para declarar que a su forma de ver el basquet, es uno de los mejores. “Él es tremendamente difícil de marcar, uno de los mejores jugadores de la liga. Llega hasta el aro, tira de tres. Hace de todo, pasa la pelota. Él es un jugador fantástico, uno de los mejores en la Liga» declaró Pop a Tom Orsborn de San Antonio News Express.

Ya dentro de la cancha, el juego tuvo un dominio alterno y como bien mencionó el entrenador de San Antonio, fue muy difícil marcar a Kyrie Irving quien se despachó 36 puntos que mantuvieron a los Celtics arriba en el marcador durante toda la primera mitad. Al regreso del medio tiempo, el conjunto tejano supo nivelar las cosas y gracias a LaMarcus Aldridge, el conjunto tejano logró revertir el marcador para llevar el final del juego al drama.

Manu Ginóbili dio una clase magistral

Empatados a 102 con menos de 30 segundos, Manu Ginóbili dio una clase magistral de cómo jugar contra reloj. Con mucha paciencia, el veterano argentino recuperó un rebote luego de que Rudy Gay fallará un triple, salió al perímetro y con ayuda de Aldridge se preparó para hacer tirar un triple letal. Manu anotó de larga distancia para darle el triunfo a los Spurs.

La experiencia del jugador de Bahía Blanca le dio el triunfo a los Spurs y puso fin a la racha de cuatro partidos en fila con triunfo para los Celtics. A falta de mucho tiempo para el fin de la temporada, este partido y esa jugada de Manu ya pueden ser anotadas en lo mejor de la NBA.

Foto Vía Twitter

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