Michael Jordan es una de las leyendas del basquetbol mundial, para muchos el mejor jugador que ha pisado la tierra. En su extensa y exitosa carrera, «Su Majestad» fue protagonista de algunos momentos inolvidables en la historia del baloncesto y en esta ocasión recordamos una de sus hazañas más peculiares. El 23 de noviembre de 1991, los Toros de Chicago visitaron Denver para enfrentarse a los Nuggets que tenían sus esperanzas centradas en un novato sensación: Dikembe Mutombo.

Jordan siempre fue un jugador muy bromista, sobre todo con los jugadores nuevos. En el juego entre Nuggets y Bulls, Jordan tomó el balón para dedicarle un tiro libre sin ver a Mutombo, una de las tantas historias maravillosas de Michael Jordan.

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No cabe duda que Su Aireza siempre fue un fuera de serie, con mucha creatividad y un talento nato que lo convirtió en figura del basquetbol. Jordan tuvo un partidazo de 37 puntos, aunque no logró su cometido de intimidar a Mutombo ya que también respondió y colaboró con 22 puntos y 9 rebotes, el mejor de los Nuggets que perdieron por marcador de 107 a 100.

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