Lakers de Los Angeles con paso firme

Cuando inició la actual temporada de la NBA, la gran mayoría no veía a los Lakers como un equipo capaz de colarse a puestos de Playoffs, no obstante, con el paso de los juegos, los dirigidos por Luke Walton se notan como un conjunto sólido y gran parte de eso es gracias a LeBron. Con una figura de tal calibre a su lado, Kuzma y Ball comienzan a tomar confianza y poco a poco su talento va madurando a tal grado de ser los hombres de confianza de James. Si a esto le agregamos la llegada de Tyson Chandler, quien aporta estabilidad a la defensiva, y el gran nivel mostrado por JaVale McGee, los Lakers lucen como una máquina bien aceitada.

Los Lakers llegaron al juego del miércoles con marca de dos derrotas contra los Spurs, mientras que los tejanos tienen una marca perdedora que no vivían desde el inicio de la temporada del 96. Fue un juego que no defraudó en lo absoluto con un LeBron James que desde temprano comenzó el show pasando por encima de LaMarcus Aldridge.

Durante la primera mitad los Lakers lograron mantener un buen ritmo que los llevó a tener el control del marcador. Una pieza clave del accionar de los Lakers fue Lonzo Ball, un jugador que poco a poco entiende su rol en el equipo y eso significa que está para ser quien asiste a sus compañeros.

Fieles a la filosofía de Gregg Popovich, los Spurs no se dieron por vencidos, a pesar de irse al descanso con una desventaja de cinco puntos. Los tejanos tuvieron un tercer periodo intenso, con canastas importantes de DeMar DeRozan, Patti Mills y Rudy Gay para darle la vuelta al marcador. Fue un parcial de 37 puntos para los Spurs que se encaminaron a una nueva victoria frente a los Lakers.

LeBron James comenzó el cuarto período encendido. Poco a poco la estrella de los Lakers tomó confianza y empezó a tirar bombazos de tres puntos desde muy atrás del perímetro.

Esa confianza e intensidad se contagió en todos sus compañeros. Josh Hart entró pocos minutos pero anotó dos triples que ayudaron a los Lakers a disminuir la distancia en el marcador. Lonzo Ball hizo lo propio y después de una asistencia de LeBron, anotó una triple que puso a los Lakers arriba cuando faltaban menos de tres minutos para concluir.

Con un cuarto periodo de 43 puntos, 20 de ellos a la cuenta personal de LeBron James, los Lakers derrotaron a los Spurs por marcador de 121 a 113. El autoproclamado Rey finalizó el encuentro con 42 puntos, 6 asistencias y 5 rebotes, una noche más en el trabajo para LeBron.

Mención especial a Lonzo Ball que terminó con 14 puntos y 9 asistencias, además de apoyar con 2 robos de balón. Kyle Kuzma también tuvo un buen partido siendo el segundo máximo anotador con 22 puntos, 9 rebotes y 5 asistencias. Por último, Tyson Chandler anotó sólo un par de puntos en poco menos de media hora de acción, pero colaboró con 9 tablas a la defensiva.

Del lado de los Spurs, DeMar DeRozan y Rudy Gay lograron pasar las 30 unidades, 32 y 31 respectivamente, sin ser suficiente para lograr vencer a los Lakers que llevan cuatro victorias al hilo. Al finalizar el partido, Gregg Popovich fue cuestionado sobre el gran partido de LeBron James y no tuvo otra respuesta: “Es LeBron James, es un jugador difícil de cubrir”.

Foto vía Lakers

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