La Copa del Mundo FIBA 2019 tuvo en Estados Unidos una de sus más grandes decepciones al caer en la ronda de cuartos a manos de Francia. Si bien, es cierto que en el camino el USA Team se enfrentó a muchas bajas, ya sea por lesión o decisión propia, el no haber llegado a la final representa un fracaso para el equipo y el responsable del equipo es Gregg Popovich. En su primer torneo al mando del equipo, Popovich revivió algunas malas experiencias que tuvo en las ocasiones anteriores que estuvo en el cuerpo técnico de EE. UU.

 

La derrota de Estados Unidos contra Francia en cuartos dio por finalizada una racha de 58 partidos seguidos invictos en torneos internacionales y con jugadores NBA. Al perder el siguiente juego contra Serbia, el USA Team acumuló su segunda derrota al hilo, siendo esta la primera ocasión desde que la Copa del Mundo FIBA del 2002. Para su mala fortuna, a Gregg Popovich le ha tocado anotarse estos fracasos en su curriculum y se unen a cuando EE. UU quedó en el 6to lugar en el mundial de 2002, celebrado en Indianapolis, y el escándalo de Atenas 2004. En ambas competencias Pop fue asistente de Larry Brown.

Ante la derrota, Gregg Popovich sigue siendo un entrenador maduro que siempre busca sacar alguna enseñanza para sus jugadores. En entrevista posterior a la derrota contra Francia, el coach del USA Team se limitó a reconocer al rival y olvidarse de las ausencias: «Creo que es bastante irrespetuoso traer ahora este debate aquí, que no tenemos este jugador o este otro. Es irrespetuoso para Francia o para cualquier otro equipo del torneo. Francia nos venció, no importa quién está en el equipo». Es así como uno de los mejores entrenadores en la historia del basquetbol demuestra que la clase va más allá de la duela y que, a pesar de los triunfos en la NBA, todavía tiene mucho que aprender.

Foto vía FIBA

FacebookTwitterWhatsAppCopy Link