Hace 22 años un 4 de febrero de 1993 Larry Bird concreto su ascenso al recinto de las leyendas de los Celtics de Boston. En una ceremonia dedicada especialmente para él, la franquicia más ganadora de la NBA retiro el número 33 que Bird portó con orgullo durante toda su carrera. La ceremonia tuvo lugar en el viejo Boston Garden que abrió sus puertas especialmente para rendir un homenaje al hombre que hizo vibrar a los aficionados celtas con la conquista de tres campeonatos en la década de los 80.
Copyright 2002 NBAE (Photo by Lou Capozzola/ NBAE/Getty Images)
La noche fue especial y uno de los momentos más emotivos fue la aparición de Magic Johnson quien enfundado en un pants de Lakers, sorprendió a todos cuando se quitó la chamarra para mostrar una camiseta de sus archirrivales, los Celtics y todo por complacer a su amigo y gran rival que esa noche era el homenajeado.
De esa noche, nos quedamos con las palabras que Magic pronunció al momento de su discurso:
“No habrá nunca, nunca, nunca jamás otro Larry Bird.”
El día que el 33 de Larry Bird se convirtió en leyenda por viva basquet
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