El juego por el campeonato del Final Four en el que Stanford se impuso a Arizona por marcador de 54-53 terminó siendo cardíaco, como muchos de los juegos de la competencia colegial femenil de este año.

A pesar de no recibir la misma atención y recursos de la NCAA, las jugadoras se entregaron durante todo el certamen.

Y esta dedicación y buen desempeño se vio recompensado en los ratings. Por ejemplo, el juego de primera ronda entre Tennessee y Middle Tennessee transmitido por la cadena ABC obtuvo una audiencia superior a cualquier partido femenil de primera ronda desde 2010, de acuerdo con información de Sports Media Watch (SMW). También, de acuerdo con cifras de esta misma empresa, la instancia del “Sweet 16”, tuvo en promedio un 66% más audiencia que en 2019.

Equipos como las UConn Huskies tuvieron un rating mayor al obtenido en su participación en el 2019. Por ejemplo, el juego entre UConn y Baylor tuvo 1.7 millones de espectadores en promedio en ESPN, un 32% más que el juego de “Elite Eight” en el que participaron las Huskies en 2019. Y si esto fuera poco, el juego entre UConn y Iowa del “Sweet 16”, transmitido por ABC, tuvo un incremento en audiencia del 129% en comparación con la misma etapa del torneo anterior, para las chicas de la Universidad de Connecticut.


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Y esto no es cosa nueva ya que los ratings del campeonato femenil de la NCAA han crecido año con año, a punto tal, que estos resultados convencieron a ESPN de transmitir el torneo femenil 2021 completo, por primera vez.

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