La Liga de Verano en las Vegas será la ocasión ideal para que la NBA comience a poner a prueba una nueva manera de castigar a aquellos jugadores que pretenden engañar a los árbitros fingiendo faltas aplicando el famoso “flooping” que en las últimas campañas ha ido en aumento.
De acuerdo a un comunicado por parte de la NBA, si un jugador incurrió en un “flop” será determinado por el oficial y en su caso, su equipo será penalizado con un tiro libre en contra y la posesión del balón.
El jugador que cometa la infracción, será sancionado con un foul técnico por actitud antideportiva, pero no contará en su cuenta de faltas ni ameritará una expulsión. No será necesario que los arbitros detengan el partido para marcar una acción de flooping.
La NBA también contempla aplicar en la Summer League de Las Vegas, otra prueba, el Coach’s Challenge, donde los entrenadores que reten una jugada y el resultado les sea favorable podrán tener una nueva oportunidad para volver a retar una jugada dudosa.
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