El emotivo discurso de Erica Wheeler, la MVP del All Star de la WNBA

El fin de semana pasado se vivió el All Star de la WNBA en Las Vegas, donde la Conferencia del Oeste se impuso a la del Este en un triunfo que fue sellado con un triple monumental de Erica Wheeler. Esta gran jugada, y los 25 puntos y 7 asistencias que anotó en el partido, le valieron ser nombrada la MVP del Juego de Estrellas, convirtiéndose en la primera en lograrlo sin haber sido seleccionada en el Draft. El momento más emotivo de la noche fue cuando Erica rompió en llanto al recibir el premio y brindó un conmovedor discurso.

«Nunca te rindas. No te rindas jamás. Da igual lo que te digan, tú sigue adelante. Eso es lo que siempre tengo en mente. Mi madre es mi motivación. Ella murió cuando yo estaba en la universidad y es lo que me empuja a seguir, que sé que me está viendo» fueron las palabras que Erica mencionó al recibir este galardón tan importante, no sólo en su carrera, también histórico para la WNBA. Con 28 años, la vida de la Más Valiosa del Juego de Estrellas no ha sido nada sencilla y a lo largo de su carrera tuvo que sobreponerse a varios tropiezos, entre ellos el asesinato de dos de sus amigas en un tiroteo.

Erica Wheeler creció en uno de los barrios más peligrosos de EE. UU, Liberty City, Miami, un lugar del que logró escapar para asistir a la Universidad de Rutgers en Nueva Jersey. Durante su etapa como colegial, Wheeler perdió a su madre a causa del cáncer y pensó en dejar el basquetbol para siempre. La entrenadora de Rutgers, Vivian Stringers, la convenció de seguir su sueño y honrar la memoria de su madre.

Erica no fue seleccionada en el Draft, así que su carrera como profesional comenzó en la Isla del Encanto con las Leonas de Ponce y de ahí comenzó su camino por el basquetbol mundial, de Turquía a Brazil, donde se encontró con Erika de Souza, quien le ayudó a conseguir un lugar en el Atlanta Dream. Ahora con las Indiana Fever, Erica Wheeler se ha convertido en un referente histórico dela WNBA, convirtiéndose en la primera jugadora que no fue seleccionada en el Draft y que rebasó los mil puntos y las 500 asistencias. En esta temporada, Erica tiene un promedio de 12.3 puntos y 5.8 asistencias por partido, además de servir de inspiración para todos aquellos que tienen un sueño por cumplir.