Por @absolutalx

¿Qué ha hecho tan exitoso el documental The Last Dance? La respuesta podría ser obvia, todo lo que tenga que ver con Michael Jordan es garantía de éxito, es una apuesta segura y lo sabemos desde hace años, aún recuerdo cuando preparábamos alguna de las ediciones impresas en Viva Basquet y decidíamos poner a MJ en la portada, sabíamos que esa edición sin lugar a dudas sería un ejemplar cotizado.

Los Bulls lograron sumar muchos aficionados en aquellos años y el volver a vivir esa época gloriosa ha hecho que muchos de esos fans que con el pasar del tiempo abandonaron al equipo o ya no estaban tan pegados a ellos, regresaran para revivir esos años maravillosos para los aficionados de la Bulls Nation.

Pero el éxito de este documental es que le ha pegado directo a la nostalgia de una generación que creció viendo cómo los jugadores se fueron convirtiendo en superestrellas y fuente de inspiración para todos aquellos que, si bien soñábamos con jugar algún día en la NBA, nos conformábamos con salir a echar la reta y tratar de emular lo que veíamos en la pantalla, motivados por la intensidad con la que se jugaba en esos años.

Así que The Last Dance, no solo atrapa la atención de los seguidores de Jordan, Pippen y compañía, se suman a esos millones de personas que la han visto los que fueron fans de los Pistons, de los Cavs, de los Knicks, los Lakers, Pacers, los Sonics, el Jazz y hasta los Hornets de Alonzo Mourning y Larry Johnson.

Y de nuevo queda claro, Michael Jordan es el más grande de la historia, pero como en toda buena película, sin la presencia de otros grandes actores, el resultado no sería el mismo. Así que gracias a The Last Dance por llevarnos de vuelta a una de las mejores épocas de nuestra historia con el basquetbol.

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