A pesar de su paso trompicado, los Spurs de San Antonio continúan siendo uno de los equipos más dominantes de la NBA y en su visita a Orlando mostraron todo su poder ofensivo. El domingo perdieron de forma sorpresiva contra los Knicks, para después tener un juego muy cerrado en Indiana.

El partido fue dominado de principio a fin por el conjunto tejano que se llevó la victoria por un contundente 107 – 79, con una actuación demoledora de LaMarcus Aldridge con 23 puntos, 3 rebotes y 3 asistencias. Uno de los momentos espectaculares del partido fue la conexión entre Kawhi Leonard y Manu Ginobili que acabó en un volcada espectacular después de un pase sin ver del jugador argentino.

Los Spurs cierran una gira de 8 partidos de visitante en Staples Center con dos partidos frente a los Clippers y Lakers después del receso del All Star Weekend.

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