Esta es una pequeña carta que quiero hacer pública ya que dado tu esfuerzo, considero que lo amerita.

Recuerdo cuando te conocí en Monterrey, una chica de 1.85 mts de altura, de 15 años muy alegre y risueña. Siempre comiendo y riéndose con sus amigas. Siempre muy responsable y ñoñis jeje bromis.

Me dio muchísimo gusto verte ahora en esta aventura llamada Duke, no me importa si juegas dos minutos, si gana tu equipo un campeonato o si pierde la mayoría de los juegos, si te meten todo el partido o si no te meten para nada. Lo importante es remarcar todo lo que ha pasado para que llegues aquí.

Querida Bego

Querida Bego

Tal vez mucha gente no sepa lo difícil que es ser parte de un programa como el de Duke, una escuela que esta reankeada como la número 12 a nivel nacional (de 300 escuelas Div I solo rankean 25). Duke es una escuela legendaria en el ámbito de basquetbol, tu entrenadora Joanne P. McCallie, es de esos personajes icónicos al tener un record de 589–219 (.729).

Tú estás dentro de esta élite de baloncesto y de nivel académico. Cabe mencionar no quita nada de mérito a las jugadoras que están en Div. III o cualquier otro nivel de baloncesto en US o en México. Todo tiene su valor y todos tenemos caminos propios y esto lo sabemos. Solo me gustaría recalcar el tremendo nivel de profesionalismo que una escuela como Duke demanda, hay mucha exigencia y responsabilidad y me da muchísimo orgullo ver que esto era lo que buscabas y lo lograste.

Es un gran reto y me encanta verte maximizar tus oportunidades, es verdaderamente inspirador. Me da gusto cómo creíste en el sistema y has logrado sobresalir. Me encanta ver tu actitud humilde y muy trabajadora que desde pequeña te caracteriza (bueno seamos honestas casi nunca fuiste realmente pequeña -jaja). Por esto te admiro mucho y te echo todas las porras y buenas vibras.

Me dio mucha emoción verte ahí con tus compañeras disfrutando de la intensidad de un juego de pretemporada, concentrada en el juego, apoyando a tus compañeras, corriendo, defendiendo y hablando en la defensa. Al final son los pequeños detalles los que hacen la diferencia, esto he aprendido que es cierto tanto en la vida como en el basquet.

Querida Bego

Querida Bego

Querida Bego

Si bien es cierto que mientras más se sube de nivel en algún deporte tiende a convertirse  más en una responsabilidad que una actividad placentera,  pero cada uno debemos recordarnos porque lo hacemos y al final encontrar muy dentro de nosotros lo que queremos expresar mediante las actividades que realizamos. Así que solo quiero reiterar mis buenos deseos para ti en esta temporada, tu último año de baloncesto colegial, que sigas disfrutando cada momento, cada día que despiertes adolorida y cansada, saboréalo porque después ya no será lo mismo.

Claro que seguirá habiendo eventos y juegos muy retadores, pero nada como vivir el estilo de vida de un “student-athlete”: mínimo 5 horas al día comprometer a la práctica del basquet y lo relacionado a esto: nutrirte, fortalecerte, estudiar video, entrenar tu mente a las exigencias de una entrenadora estrella, estar en la mira de al menos 10 personas dedicadas exclusivamente a hacer tu equipo mejor y pelear un lugar dentro de una institución que tiene atletas top a nivel nacional, niñas que desde chicas las preparan para este tipo de competencias.

Ser parte de un programa top que busca llegar a las finales de la NCAA y encima de todo esto, lo más importante, ser una excelente estudiante. Todo esto no es fácil de llegar a ser parte y tu mi Bego lo has logrado, eres una fiel representante de tu familia y de muchos valores.

Te mando un abrazo con mucho cariño, gracias por inspirarnos a mí y a muchos otros que soñamos con el basquet en México.

FacebookTwitterWhatsAppCopy Link