Selección Mexicana de Basquetbol

Selección Mexicana de Basquetbol en viva basquet Crédito: Conade

Después de años y años de estancarse uno de los deportes más queridos y practicados en México, el baloncesto, gradualmente se fue avizorando la luz, la ansiada luz al final del túnel y esto comenzó, en cuanto a logros deportivos en 2010 cuando el quinteto nacional se colgó una medalla de plata en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Mayagüez. Luego, un año más tarde, en Guadalajara 2011, se sumó una presea plateada más con un equipo que tuvo un camino lleno de vicisitudes e inconvenientes, pero que fue recompensado con el segundo lugar en los Juegos Panamericanos.

No han faltado los tropiezos y en estos también hay que cargarles la mano a los directivos mexicanos, quienes a pesar de trabajar con las manos atadas en muchas ocasiones, han tenido vías y conductos para proveerse de herramientas y estrategias que les permitan elevar el nivel del baloncesto en nuestro país.

El resultado de no aprovechar el envión que dejó ese éxito en Guadalajara 2011,  vino en 2012 con la amarga eliminación al perder un juego ante Jamaica en el Centrobasket de ese año, ese resultado parecía acabar con todo el esfuerzo y el éxito de los pasados años. Un milagroso, fortuito e inesperado vuelco, vino a darle una segunda oportunidad a México, por la desafiliación por temas administrativos a Panamá, equipo calificado al Pre Mundial FIBA Américas, le abrió la puerta a la Selección y ésta aprovechó todas y cada una de las oportunidades.

La exitosa y probada fórmula de la ética de trabajo y visión del español Sergio Valdeolmillos, que dio como resultado la emotiva medalla de México en los Panamericanos, quiso volver a ser repetida ante esta nueva oportunidad y aunque digan que las segundas partes nunca han sido buenas, siempre hay una excepción a la regla. Conforme fue avanzando el certamen en Venezuela, México no sólo fue adquiriendo la preferencia de la afición local, que desencantada por el pobre desempeño de su selección, comenzó por apoyar a los 12 Guerreros, sino que también lucía como un equipo con mayor confianza, siendo ellos quienes le iban a poner el límite a lo que querían lograr y nadie más.

Dos finales perdidas ante Puerto Rico sentaban las bases para una gran revancha, pues en Mayagüez 2010 y Guadalajara 2011, los boricuas triunfaron a costa de los jugadores mexicanos.

Y vaya que se la cobraron, de forma agónica, en un partido que fue emocionante de principio a fin, México vio transcurrir los segundos más largos cuando el último tiro puertorriqueño al aro salió, para decretar a los 12 Guerreros los campeones de América y con un insospechado pasaje a España 2014, el primer Mundial FIBA al que va a asistir nuestro país tras 40 años de espera.

Un par de días atrás, con una Conade que ha decidido apoyar el basquetbol (algo que no pasó en la anterior gestión), se le otorgó el Premio Nacional del Deporte en la categoría de deportistas profesionales a los elementos de la Selección Mexicana de Basquetbol. Esto causó, como siempre, que algunos y algunas deportistas estuvieran en desacuerdo, pero si un deporte ha sufrido maltratos, desdenes, y castigos, ese ha sido el baloncesto, por eso creo que es muy merecido el galardón.

Ahora la pregunta es: ¿Qué van a hacer los dirigentes con este inmejorable momento que vive el deporte en nuestro país? No sólo me refiero al Comité Olímpico Mexicano o a la Conade, sino también a la Ademeba y a la gente de la LNBP. ¿Pasará otro éxito sin que sirva para construir una base sólida para el futuro y únicamente será vivir del recuerdo y del grato sabor de boca que dejó este enorme logro?

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