Sobre sus pisadas.

LeBron James nació y creció en Ohio, ahí aprendió a jugar y respetar el basquetbol, cuando fue seleccionado por los Cavs en el 2007 parecía el matrimonio perfecto, el mejor prospecto de un generación y un equipo que nunca había ganado nada. Sin embargo siete años después, producto de frustraciones acumuladas y la falta de paciencia propia de una persona joven lo orillaron tomar una decisión por la cual se convirtió en uno de los deportistas más odiados de Estados Unidos.

Photo by Chris Trotman/Getty Images

Cuatro años después de salir en busca de un mejor lugar para desplegar su talento, LeBron parece haberse dado cuenta que en todos lados hay inconvenientes, que no importa a donde vaya siempre va a estar bajo la mirada de los medios que van a maximizar todos su errores dentro y fuera de las duelas por pequeños que estos sean, cuatro años después decide voltear a ver el camino recorrido y regresar sobre sus pisadas.

¿Cuáles serán los efectos de esta decisión? El primero y el que más salta a la vista es el fin de una era en Miami, todo indica que sin James, jugadores como Ray Allen y Chris Bosh jugaran en otros equipos dejando solo a Dwayne Wade.

Otra repercusión será el destino de agentes libres como Carmelo Anthony y Kevin Love, dos de los peces gordos este verano, que estaban esperando la decisión de James para ellos su movimiento.

Y por último es el efecto directo sobre los Cavs, con un equipo con Kyrie Irving, quien acaba de firmar una extensión de contrato, el novato Andrew Wiggins quien es un gran prospecto, Anderson Varejao y la posible llegada de Ray Allen y Kevin Love, Cleveland subirá peldaños en la Conferencia del Este.

La pregunta es ¿les alcanzará para ganar un anillo de campeonato? Este año es difícil, así que como lo dijo el propio LeBron, su paciencia será puesta a prueba. Pero si aprendió bien la lección entenderá que los equipos no se compran, se trabajan ya que si hacemos un balance de su estadía en Miami, en cuatro años solo consiguió dos añillos, un fracaso si se considera la inversión del Heat para que llegara el Big Three.

James tiene que seguir su propio camino, pelear las batallas desde su trinchera, en estos momentos ya es considerado uno de los mejores jugadores en la historia de la NBA y eso tiene que ser suficiente para él, si deja que las comparaciones con Michael Jordan lo afecten y se vuelve una obsesión el ganar igual o más campeonatos que su “Majestad” la presión acabara por hacerlo pedazos.

Habrá que esperar unos cuantos meses para ver el regreso de James a los Cavs, imagen que sin duda será la portada de decenas de revistar alrededor del mundo. Sin embargo, también habrá que esperar la recepción que tendrá por parte de los aficionados en el sur de la Florida equipo al que hoy deja a la deriva.