La reactivación del deporte se ha ido propiciando poco a poco, con muchas medidas preventivas y protocolos específicos que han cambiado totalmente el desarrollo de un espectáculo deportivo, aunque aún no se permite la entrada de aficionados al graderío en ningún juego profesional y eso ha prendido las alarmas en varias disciplinas, una de ellas es el basquetbol en nuestro país.

En este 2020 se contemplaban actividades muy importantes por la conmemoración de los 20 años en la segunda etapa del Circuito de Baloncesto de la Costa del Pacífico, un tema que ya mencionamos hace algunas semanas y que aún nos seguimos lamentando los aficionados de dicha liga, misma que canceló su campaña en Junio pasado, además de otros festejos pero en el rubro de la Liga Nacional de Baloncesto Profesional que de igual forma serán pos puestos, sin embargo, la campaña aún se mantiene en pie y será interesante ver el panorama para el desarrollo de la misma.

El principal circuito del deporte ráfaga mexicano ha sufrido algunos cambios, equipos que han declinado su participación desde antes de la problemática por el COVID-19, como el caso de Ángeles de Puebla, Huracanes de Tampico y Laguneros de La Comarca, mientras que en el caso de Capitanes CDMX los motivos son totalmente distintos, pues se convertirá en la primera franquicia mexicana que participará en la NBA G-League (aunque se dice que también suspenderán sus actividades este año); otro de los equipos que estuvo en duda fue Aguacateros de Michoacán, quienes finalmente obtuvieron el apoyo necesario para confirmar su participación en el campeonato en puerta, previsto para iniciar en poco menos de dos meses.

Pero, ¿Es viable una temporada sin aficionados en los recintos de LNBP? 

Aunque varias directivas afirman que si es posible desarrollar una campaña con esas condiciones, la realidad es que varias franquicias ponen en duda su participación, debido a los altos gastos operativos en traslados, nómina, mantenimiento y otros factores económicos fuertes que son importantes al momento de poner las “cosas en la balanza”.

Como bien sabemos, el basquetbol en México aún está distante de acaparar los mismos reflectores que el principal deporte seguido en nuestro país: el futbol soccer, por lo que hablar de un convenio televisivo favorable no es una opción para solventar una temporada sin apoyo de taquilla, sumado a la disminución en la exposición de marcas patrocinadoras en los inmuebles y que tendrán que recurrir a opciones digitales para darle una cobertura idónea a cada empresa que busca posicionar su nombre a través del espectáculo deportivo.

Otro aspecto a destacar es que no todos los equipos cuentan con una solvencia económica privada y dependen de apoyos externos, los cuales están en duda por las condiciones de salubridad y las prioridades gubernamentales de cada entidad, sumado a que hay plazas que atraviesan serios problemas debido a la pandemia como Mexicali (Soles), Monterrey (Fuerza Regia), Guadalajara (Astros), y otros más que tendrán que esperar que las cuestiones de salud evolucionen de manera positiva y que ello se refleje en la luz verde para la realización de eventos masivos, como es el caso de un partido de baloncesto.

Hablando regionalmente, en el Pacífico mexicano se vive una incertidumbre en el CIBAPAC, donde algunas franquicias han decidido no participar en un circuito que en un par de años ha escalado en gran manera su posicionamiento y exposición dentro de la disciplina, convirtiéndose en una liga de fogueo para jóvenes pero que se verá afectada por las distintas circunstancias que aún se viven en México.

Regresando a la LNBP, aún falta para el arranque de las acciones en las duelas pero los preparativos ya se plantean desde hace varias semanas, sin embargo, la moneda sigue en el aire y todo dependerá del progreso que tenga nuestro país ante los factores provenientes del COVID-19.

Les recuerdo seguir las medidas y protocolos de prevención, el lavado de manos y uso de cubrebocas es muy importante, evita la exposición en zonas de riesgo y en caso de ser posible, mantente en casa.

Espero se encuentren muy bien, deseando que el baloncesto vuelva a la normalidad lo más pronto posible, pero sobre todo, deseando que gocen de buena salud al lado de sus seres queridos.

Nos leemos pronto…

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