El pasado fin de semana vivimos un hecho histórico para el basquetbol mexicano, no solo porque se retiro de las duelas uno de los jugadores más importantes en la historia de este deporte en nuestro país. La despedida de Gustavo Ayón fue un acto que debe dejar una lección pues una figura de su tamaño no podía irse sin recibir el cariño, admiración y respeto que los aficionados, amigos, familia y medios le brindaron al Titán el domingo pasado en Guadalajara.
Este tipo de eventos deben marcar un precedente, es cierto que Gustavo tomó la iniciativa y con el apoyo de la gente de Astros logró organizar un evento de mucha calidad, pero ojalá que en los próximos años, cuando toque despedir a otros jugadores que han dejado huella en nuestro basquetbol, las autoridades y la gente de basquetbol sigamos este ejemplo. Afortunadamente tuvimos la fortuna de ver a verdaderas leyendas de nuestro basquetbol como Manuel Raga, Arturo Guerrero, Horacio Llamas, Víctor Mariscal, Oscar Castellanos o el propio Omar Quintero, tal como lo comentó Ayón, era una fiesta para reconocer a figuras del nuestro basquetbol y vaya que se logró.
En el marco de esa celebración, tuvimos la oportunidad de platicar con Gustavo, dar un recorrido por lo que fue su carrera como profesional, recordando momentos importantes. Una charla que hoy compartimos y que sin duda nos emociona al recordar los momentos que llevaron al Titán, a ser una leyenda del deporte mexicano.
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